La situación en la cual está sumergida la humanidad, sin meta, sin sistema filosófico verdadero, es muy inquietante, ¡cuántas veces se los he dicho! Con la mentalidad de los humanos de hoy, podemos esperarlo todo. Y esto aún no es nada, otros acontecimientos más terribles van a producirse, ¡es tan fácil de predecir!

Cuando los hombres ya no llevan a ningún Dios en su corazón, ¿por qué deberían seguir siendo buenos, generosos y dulces? Es verdad, parece inútil ser honestos y buenos en semejantes condiciones. Por eso tengo ahora el deseo de presentar, ante el mundo entero, un sistema filosófico, religioso o moral, que nunca nadie, ni sabios, ni pensadores, ni religiosos puedan demoler.

Las leyes de la Naturaleza han existido por siempre

Podrán reírse, podrán burlarse, pero será un sistema irrefutable e indestructible, porque no es un invento humano que varía según las épocas y los lugares, sino que es la Inteligencia Cósmica la que lo ha establecido.

Cuando han transgredido ciertos códigos o ciertas prescripciones de la moral humana, si los descubren, deben pagar, pero si se escapan, la Naturaleza no vendrá a castigarles porque sólo han transgredido la moral humana. Mientras que si transgreden las Leyes de la Naturaleza no se escaparán. Aunque los humanos vengan a inclinarse ante ustedes y a traerles coronas, la Naturaleza les castiga. Para los humanos quizá sean héroes, ¡pero la Naturaleza les manda a la cama! La Naturaleza es implacable.

El significado de «Dar al César»

No es que ahora les aconseje que transgredan las leyes humanas, no. Ha sido dicho: “Den al Cesar lo que es del Cesar y a Dios lo que es de Dios”, es decir, hay que respetar, a pesar de todo, las leyes del país, las leyes humanas, pero ante todo hay que respetar las Leyes de Dios, es decir, las Leyes de la Naturaleza.

Un tercer punto de la Ley Moral Cósmica

El primer punto que les presenté, lo tomé de la agricultura, y es la ley de las causas y de las consecuencias: cosechamos lo que sembramos. Después les mostré qué, de la misma forma que en la vida física, el ser humano siempre se ve obligado a hacer una elección, una selección, también debe escoger y seleccionar en el campo de los sentimientos y de los pensamientos. Son dos puntos irrefutables: han quedado bien claros… Hoy les presentaré otro punto muy importante de la Moral Cósmica, porque concierne a una actividad esencial del ser humano: la creación.

Sin duda, habrán observado que tomo siempre como punto de partida la vida concreta, lo que vemos, lo que podamos tocar con los dedos: las piedras, las plantas, los animales, los humanos, su comportamiento y su vida, y no ideas abstractas, filosóficas, metafísicas, porque no es un buen método pedagógico empezar con abstracciones. En pedagogía siempre se preconiza tomar como base lo concreto, visible, tangible, para elevarse después al dominio de la abstracción. Y si empiezo siempre paseándoos un poco sobre la Tierra, es porque ésta constituye para mí el mejor punto de partida.

(Continúa…)

Omraam Mikhaël Aïvanhov
Obras Completas, vol. 12, Las Leyes de la Moral Cósmica
Cap. 3, La actividad creadora como medio de evolución