Cuando salimos de viaje en nuestra vida, necesitamos llevar provisiones – pan, por ejemplo. El pan representa las verdades de una enseñanza espiritual. Y su naturaleza es tal que puede ser una provisión, no sólo para nuestra vida actual, sino también para las futuras vidas. Si queremos que estas verdades nos alimenten cada día, las debemos amar y confiar en su poder.

Una enseñanza espiritual es un ser viviente que responde de acuerdo a cómo le recibimos. Todos nos hemos embarcado en un largo viaje, que comenzó hace miles de años, y que no ha terminado. Ya hemos viajado a través de muchas regiones, ¡y muchas más nos esperan!

Nuestra vida actual es sólo una etapa en este viaje, y nos estuvimos preparando para ella por un largo tiempo. En lo que vivimos ahora, comemos el pan con el que llenamos nuestro bolso en el pasado.

Omraam Mikhael Aivanhov
Izvor 242, En las fuentes inalterables de la alegría

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