Por la mañana, al mediodía y por la noche, cada cual debe pensar en comer para mantener la vida y la salud. Pero sólo los Iniciados han profundizado desde hace mucho tiempo sobre este cuestión tan importante. Su ciencia ancestral les ha enseñado que la nutrición es extremadamente importante, y que hay muchos aspectos para la cuestión; aspectos de los que la mayoría de los seres humanos no está consciente. Y esta ignorancia es la fuente de muchos de sus problemas.

 La importancia de la actitud

Siempre recuerden lavar sus manos antes de comer. Después, intenten ponerse en un estado de paz y de calma mientras toman consciencia de que van a recibir elementos preparados en el gran laboratorio de la naturaleza. Recójanse, únanse al Creador, hagan una corta oración; y luego, en tranquilidad y silencio comiencen el proceso de la nutrición, que es una de las formas más altas de magia blanca.

En nuestros centros, antes y después de cada comida, recitamos la siguiente fórmula en búlgaro, tres veces: Bojiata liubov razreshava vsichkite problemi. («El amor de Dios resuelve todos los problemas»).

El papel de la masticación

Hay que masticar los alimentos el mayor tiempo posible, hasta que desaparezcan en la boca sin que ni siquiera tengamos que tragados. La boca, que es la primera en recibir los alimentos, es el laboratorio donde la comida que consumen es procesada, y es además el más importante, el más espiritual. El estómago sólo ocupa el segundo lugar. Es en la boca donde se desarrollan los procesos más sutiles, porque en ella se absorben las partículas etéricas, mientras que los elementos más groseros descienden al estómago. Además, incluso antes de que el alimento sea absorbido, digerido y distribuido a los órganos, el hombre ya se siente reforzado: ello prueba que antes de que el estómago reciba los alimentos, la boca ha absorbido los elementos etéricos que han ido a alimentar el sistema nervioso.

No comer nunca hasta la saciedad

Todos saben que no hay que comer exageradamente. Si, no hay nada peor que levantarse de la mesa harto, saciado, porque nos volvemos más pesados, nos materializamos. Pero lo que seguramente no saben es que el hambre prolonga la vida, la refuerza, la mejora. Si dejan la mesa con un ligero apetito, dan un impulso a su cuerpo etérico, el cual intentará entonces atraer y captar otros elementos de la atmósfera que nos rodea.

Pueden llamar a esos elementos, si así lo quieren, vitaminas, hormonas etéricas. El cuerpo etérico encuentra esos elementos y los absorbe, tanto es asi que, unos minutos más tarde, no solamente no tienen ya hambre, sino que además se sienten más ligeros, más despejados, más capaces de trabajar. Mientras que si continúan comiendo sin tener hambre, por el simple placer de comer (como suele hacer tanta gente en las reuniones, los banquetes, etc…), enseguida se sentirán pesados e incapaces de trabajar.

Si comen demasiado, provocarán en ustedes una sobrecarga, y el cuerpo etérico se fatigará, se agotará, impedido en sus funciones. Entonces, miríadas de inoportunos, los indeseables del plano astral que han visto esta abundancia de comida expuesta como en un festín, llegan para tomar parte en ella. Por eso, poco después, sienten de nuevo un vacío y desean volver a comer para llenar ese vacío… Pero entonces, los indeseables vuelven otra vez… Es así como se convierten en un cebo magnifico para los hambrientos del plano astral inferior que vienen a deleitarse a vuestra costa.

El universo entero está lleno de criaturas de todo tipo que los Iniciados han clasificado en categorías determinadas y que a menudo se mezclan en la existencia de los humanos; y es así como se explican cierto número de fenómenos y acontecimientos extraordinarios que resultan inexplicables para los hombres de ciencia contemporáneos. Por lo tanto, para no convertirse en presa de los indeseables, jamás hay que sobrepasar los limites ni hacer comidas demasiado copiosas. Leer mas…

(Continuará…)

Omraam Mikhaël Aïvanhov

Más detalles en los libros:
‘Hrani Yoga – El Yoga de la Nutrición’, Obras Completas, Vol. 16.

‘La Nueva Tierra – Métodos, Ejercicios, Fórmulas y Oraciones’, Obras Completas, Vol. 13.