Imagen: Sahasrara (Sánscrito: सहस्रार), el Chakra de la Corona, el Tercer Ojo

El lado exterior es el ámbito del intelecto; el lado interior es el ámbito del corazón, del sentimiento. Cuando observamos las cosas únicamente desde el punto de vista intelectual, las clasificamos, las analizamos, pero no las sentimos. Mientras que si las observamos desde el punto de vista de los sentimientos, nos sentiremos afectados, conmovidos, pero no las conoceremos en sus manifestaciones extemas. Ni la subconsciencia ni la conciencia de sí pueden revelamos toda la verdad ; únicamente la supraconciencia o conciencia cósmica es capaz de ello.

La subconsciencia extrae, en efecto, sus fuerzas y sus conocimientos de la profundidad de la creación, en donde se encuentran las raíces, los instintos del ser humano; mientras que la conciencia de sí extrae las suyas del contorno, de la apariencia de las cosas. Sólo un tercer punto de vista, que reúne a los dos primeros, da el conocimiento total de la realidad. Es necesario que los seres humanos aprendan ahora a mirar desde este tercer punto de vista.

Todo el mundo tiene, en mayor o menor grado, prejuicios en sus opiniones, y no es de extrañar que, en estas condiciones, se cometan tantos errores. Según sus gustos y tendencias, cada uno ve sólo un aspecto de la realidad; por eso es tan difícil comprenderse y vivir en armonía.

Omraam Mikhaël Aïvanhov
Obras Completas, Vol. 1, El Segundo Nacimiento