Hoy en día el espíritu de la anarquía, es deliberadamente cultivado y alimentado en todo el mundo. Es casi como si hubiera escuelas en las que la gente aprende a perturbar la sociedad, incitando a otros a la ira y al espíritu de revuelta.

Las fuerzas de la oscuridad están trabajando, son ellas las responsables de este trabajo diabólico. Algunos países, en lugar de propagar los virus de la enfermedad – porque serían condenados por otros por librar una guerra biológica – han optado por propagar el virus del descontento y la revuelta. ¡Y el resultado es el cáncer!

Todos los anarquistas y rebeldes contra la sociedad son portadores involuntarios de la enfermedad. Las órdenes Iniciáticas, por otro lado, que trabajan por el reino de la paz, la armonía y la hermandad para que todos los seres humanos puedan llegar a comprender, amar y estar unidos a sus semejantes, están propagando anticuerpos que erradican las causas del cáncer.

Si estos centros iniciáticos no existieran, toda la humanidad sufriría de cáncer. Sé que muy pocas personas aceptarán esta noción. Ellos dirán, «¿De qué está hablando? No hay ninguna conexión entre la anarquía y el cáncer. Ningún biólogo piensa así, de todos modos!»

¡Bueno, que confíen en la opinión de los biólogos, si quieren! Sólo les digo la verdad: el cáncer es el resultado de la anarquía tan extendida en el mundo de hoy. Por eso, todos los días, de la mañana a la noche, debemos trabajar por la armonía.

(Continúa…)

Omraam Mikhaël Aïvanhov
El Bonfin, 15 de julio de 1970

Obras Completas, Vol. 6, La Armonía
Cap. 1, La armonía.