– Proyección Astral durante el sueño
Cuando uno se da cuenta que los seres humanos pasan aproximadamente un tercio de sus vidas durmiendo, ¿cómo podemos evitar desear el no perder completamente este tiempo, y utilizarlo para un propósito útil? ¿Por qué no dar al alma y al espíritu la posibilidad de hacer un trabajo útil mientras el cuerpo se recupera?
¿Trabajar en nuestro sueño? Les puedo asegurar que es posible, y en efecto, es altamente deseable. Si quieren hacer esto, antes de dormir en la noche, pónganse mentalmente en contacto con las regiones del universo que les gustaría visitar, para encontrarse con los seres que las habitan, a fin de que se les permita aprender de ellos.
Alguien que nunca se ha ejercitado en hacer de su cuerpo el instrumento de su espíritu, no tiene la posibilidad de liberarse durante su sueño, para hacer trabajo espiritual en el mundo invisible. Deben darse cuenta que el cuerpo tiene un papel muy importante que jugar en la vida espiritual. Si no está bien educado, puede impedir que el espíritu lo deje y realice su trabajo. Hay más de un tipo de sueño…
Cuando vuestra alma logra escapar lejos del cuerpo durante el sueño, nunca permanece inactiva; viaja, contempla la inmensidad, se comunica con los espíritus celestiales, y gana mayor entendimiento del amor, de la sabiduría y de la verdad. Cuando vuelve al cuerpo, trae consigo el recuerdo de todas las revelaciones que ha recibido, e intenta comunicarlas al cerebro. A estos recuerdos le llamamos sueños.
Más aún, es durante la noche cuando los discípulos dejan sus cuerpos para reunirse con su Maestro, a fin de continuar aprendiendo de él. Aquí nuevamente, cuando despiertan por la mañana, no recordarán exactamente lo que han visto o entendido en su sueño, pero tendrán la sensación de algo hermoso y luminoso, que se quedará con ellos todo el día.
Por mi parte, a menudo les hablo durante la noche, y les digo cosas que aún no puedo revelarles en el plano físico, porque no las entenderían. Y, sobre todo, tampoco sabrían qué hacer con ellas. En cambio, las verdades que les transmito con el pensamiento, ya están actuando en sus mentes subconscientes, y cuando sean capaces de comprenderlas y usarlas, se les revelarán a ustedes.
Durante la noche, un Iniciado pude estar en varios lugares a la vez para ayudar a quienes le necesiten. Ustedes también pueden empezar a trabajar de esta forma. Antes de dormir, díganse a sí mismos: «Voy a dejar mi cuerpo físico esta noche, e iré a estudiar en el mundo invisible y trataré de ayudar a quienes lo necesiten.». Nunca olviden dormirse con el objetivo magnífico en mente, de ir a realizar algún trabajo en el plano invisible, porque este pensamiento lo que hace todo posible.
Cuando tengan un problema o cuestión que les preocupe, pueden intentar hallar una solución durante el sueño, escribiéndola en una hoja de papel, y poniéndola bajo la almohada. Todos podemos usar el trabajo del subconciente que viene de noche a ayudarnos a cumplir nuestros planes e ideas. ¿Hay algo que realmente quieran lograr? ¿Una debilidad que quieran superar o una cualidad que quieran adquirir? Mediten largamente y luego vayan a dormir con este deseo en mente, y ello continuará trabajando mientras duermen.
Con la condición de que aprendan a hacerlo con prudencia, puede ser muy benéfico utilizar el sueño para ayudarles a lograr ciertas cosas. Supongan, por ejemplo, que le desagradan a alguien, y les trata de dañar. Si no pueden ir y a hablar con esa persona, vayanse a domir con el pensamiento de que irán a verle durante la noche y decirle: «Escucha, incluso si consigues hacerme daño, ¿qué ganarás con ello? Te alegrarás por unos momentos, y yo sufriré un poco, pero el sufrimiento me hará más fuerte, y en el largo plazo, saldrás perdiendo. Y además, tendrás un Karma que pagar. Sería mejor que abandonaras todo este asunto, porque no te hará ningún bien».
De esta forma, influenciarán su subconsciente y puede decidir cambiar. Pero incluso si no cambia de parecer, al menos ustedes habrán aprendido a hacer un trabajo más con el pensamiento. Como ven, el dominio del espíritu es inmenso, infinito.
(Continúa)
Omraam Mikhael Aivanhov,
Izvor 228, Mirada al Más Allá
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