– Los principios de amor, sabiduría, verdad y sacrificio serán válidos por la eternidad.
En la tradición cristiana, Dios se manifestó a Sí Mismo, a través de Jesús. Pero antes de Jesús, Él se había manifestado a través de Moisés. Si Moisés obtuvo tan grandes logros, fue porque Dios estaba con él. Y si Jesús vino, fue porque la Ley de Moisés tenía sus días contados, y la intransigencia que la caracterizaba ya no era útil para los planes que la Inteligencia Cósmica había preparado para la humanidad. Y si fue así entonces, ¿por qué la Inteligencia Cósmica no podría tener otros planes para el día de hoy?
En efecto, en nuestros días, incluso las formas de la Iniciación han cambiado. En la antiguedad, la Iniciación tenía lugar en templos donde los discípulos debían sufrir pruebas a través del fuego, aire, agua y tierra. Pero hoy, la Iniciación ocurre en la vida diaria, sin que sus discípulos se den cuenta de ello. Los Iniciados los ponen en ciertas situaciones, los confrontan con ciertos problemas, y observan sus reacciones.
Todas las pruebas de la Iniciación están en la vida cotidiana: los cuatro elementos están en la vida cotidiano; es aquí que deben mostrar que han conquistado el miedo, la codicia, el egoísmo, la sensualidad, y así sucesivamente. Sí, está lleno de pruebas, especialmente para quienes desean progresar en el camino de la Iniciación: deben saber de antemano que sus deseos serán satisfechos, pero que antes de eso, tendrán que superar muchas pruebas.
Cuando menos lo esperen, serán puestos a prueba en sus vidas diarias, pues todas las pruebas ocurren en nuestras vidas cotidianas. Cada pequeño gesto es observado y pesado, y muy a menudo fallamos la prueba por algún pequeño detalle, porque estábamos guardando nuestras energías para algo más espectacular.
Así que deben estar despiertos y vigilantes, y recuerden: cada circunstancia de la vida puede ser una prueba. En cada ocasión serán juzgados por su desempeño, por seres en el mundo de arriba. Si pasan las pruebas les será dado un diploma; pero a diferencia de los diplomas que entregan las universidades, que pueden ajarse o quemarse, o borrarse o ser robados, el diploma que reciben de sus examinadores en el mundo superior está impreso en sus rostros, en su ser completo, nadie se los puede quitar.
Y los espíritus de la naturaleza, que saben cómo leer ese tipo de diploma, les mostrarán su aprecio al darles la bienvenida y ayudarles. Dondequiera que vayan, a través del espacio, verán su diploma. Pero si fallan sus exámenes y no reciben diploma alguno, no tendrán consideración o estima por ustedes; incluso les pueden perseguir, pues les juzgarán como seres débiles, ignorantes, inútiles.
Así que siempre recuerden esto: Todo lo que existe es resultado de la relación entre dos polos opuestos, el espíritu y la materia, los principios y las formas. Mientras están en esta tierra, los seres humanos no son capaces de vivir sólo con los principios; necesitan el apoyo de las formas. El espíritu se encarna en la forma de un cuerpo, a fin de manifestarse en el plano físico.
Cuando vuelve a las regiones del espíritu, no necesita esas formas, pero mientras aún está en la tierra, son necesarias. Pero es importante saber que las formas no duran por mucho tiempo. Dios no ha dado vida eterna a las formas; es por eso que el Cielo envía periódicamente Iniciados o Grandes Maestros a cambiar las formas existentes – pero sólo las formas, nunca los principios. Repito: Los principios es imposible cambiarlos. Sí, pues los principios son amor, sabiduría, verdad y sacrificio, y serán válidos por la eternidad.
Omraam Mikhaël Aïvanhov,
Izvor 206, Una Filosofía de lo Universal
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Obras Completas, Vol. 25, Acuario: Llegada de la Edad de Oro – I
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